Bajo la consigna de luchar por la dignificación de la producción lechera, que contribuya al fortalecimiento de la economía de todas las cuencas productoras del país, también la salud y el bienestar de los colombianos, quedó oficialmente abierta la candidatura de Luis Alfonso Calderón Beltrán al Senado de la República. La suerte de 400.000 familias que derivan su sustento de la producción lechera en nuestros campos no puede continuar en manos de quienes desde los poderes Ejecutivo y Legislativo postraron los sectores agrícolas y pecuarios al peor de los escenarios en la historia nacional.

Reflejo de ello fue el Paro Nacional Agrario iniciado el 19 de agosto del año pasado como un campanazo apenas de las movilizaciones que se pueden generar hacia adelante, de no corregirse las políticas de bancarrota que sufre el sector primario. “Mediante los Tratados de Libre Comercio impuestos por los últimos gobiernos, con la anuencia y auspicio de sus respectivos congresos, condenaron al país al despeñadero de la competencia más desigual, injusta y desleal que hemos enfrentado”, señaló Luis Alfonso Calderón, abogado de profesión e identificado en la casilla 31 del tarjetón de aspirantes al Senado de la República por el Polo Democrático Alternativo, PDA. “Los que aceptaron la entrada libre, sin aranceles, de miles de toneladas de leche en polvo, lactosueros y derivados lácteos provenientes de países donde los productores de leche reciben jugosos subsidios y ayudas económicas estatales, no deben continuar rigiendo los destinos de Colombia”, recalcó el Dr. Calderón Beltrán, líder y portavoz de los productores de leche durante las movilizaciones del 19 de agosto en Zipaquirá y la Sabana de Bogotá.

Para el candidato de los lecheros por el Polo al Senado resulta de medular importancia el impulso de una campaña de consumo de leche y derivados lácteos netamente colombianos. Y el rechazo de aquellas leches y derivados lácteos de empresas queestán empleando leche en polvo y lacto sueros importados bajo la sombrilla de los nefastos TLC. Entre otras razones, por motivos de salud pública, elemento que debería concitar la intervención de las autoridades. Luis Alfonso Calderón convocó, finalmente, a la industrias láctea colombiana para asumir reales compromisos con nuestros campesinos, tanto desde el punto de vista de la utilización y consumo exclusivo de sus productos, como para cerrarle la puerta a la importación de sus similares provenientes de otros lares, por considerar que si bien ahora pueden acarrear aparentes ventajas comparativas (léase ruina de nuestro sector agropecuario nacional), al final se volverán contra ellos y terminará sacándoles los ojos, como los buitres. ¡SEAMOS BUENA LECHE!